Venera y colineta
La venera, cuya historia se comentó en otro apartado, y la colineta son dos dulcerías propias del occidente, muy relacionadas con el Camino de Santiago (al menos, la venera) y prácticamente desconocidas en la Asturias central y occidental.
La colineta, palabra que deriva de colina, consiste en un pastel parecido al bizcocho hecho con huevos, azúcar y almendra molida y cocido al horno; ingredientes que de algún modo son similares a los de la venera, distinguiéndose de ésta más en la forma que en la esencia. Fue Juan Santana quien dio noticia primera sobre este postre que él localizó en tierras naviegas dándose la circunstancia de que, al parecer, únicamente se elabora en la actualidad en un convento de monjas en Ribadeo.
Las hermanas Bertrand en su Libro de Cocina ofrecen la fórmula de este postre:
«Se baten bien una docena de yemas con media libra de azúcar y después se agrega media libra de avellanas turradas, mondadas y bien machacadas. Todo bien revuelto se echa en una tañera untada con manteca y se mete en el homo que no esté muy fuerte. Para conocer si está cocida se introduce una aguja de hacer media, que debe salir limpia».
Manuel María Puga y Parga, en 1916, y la marquesa de Parabere, entre otros, ofrecen diversas fórmulas de colineta (Colineta a la antigua y Colineta a la moderna).